viernes, 28 de marzo de 2014

Recomendaciones: El principito

La obra que os traigo hoy es un clásico entre los clásicos. El principito es un libro que, como dijo mi profesor de filosofía una vez, está escrito para niños pero es para que lo lean los adultos. Es una lectura obligatoria para todos aquellos que les guste absorber un libro frase por frase. Tiene un montón de contenido que te hará pensar y plantearte las cosas de otra manera.
El relato es muy simple: un piloto de avión se topa con un niño que dice ser el príncipe en su planeta y le cuenta sus encuentros en un viaje a través del espacio.
Además es muy tierno, todo está masticado para que la lectura sea fácil y apta para todos los públicos. No tienes excusa para leerlo: lo puedes encontrar en cualquier librería a un precio muy económico y este es un libro que vas a querer conservar en papel para leerlo y releerlo.

https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi3YKOElMOjfx6OulBsUnO1GjiHjrFHv3s6bN655hDATrW8brx3WL1a5hcApIcbiXG1jYlwVfApYBv0NuKX4v5qOibdlnfJaTM4mh0fbonh123adEyaj3dj9fit26ILetyw0OVTRrwA7u6o/s1600/el-principito-spanish-1971-spain.jpg

¿Ya lo has leído? ¿Te ha gustado? No dudes en dejar un comentario con tu opinión. ¡A leer que son dos días!


martes, 25 de marzo de 2014

Olor a papel viejo

La semana pasada fui al museo "Molí paperer" de Capellades. Fuimos toda la clase de 1º de Diseño Editorial de l'Escola del treball a una visita guiada al taller antiguo donde se hacían los papeles. Es muy interesante y os recomiendo que vayáis. Os dejo algunas fotos de la salida y aquí tenéis el enlace de la web del museo.





lunes, 24 de marzo de 2014

Una vida normal

En una casa a las afuera de una cuidad común vivía Gregorio con su preciosa esposa. A él le gustaba pasar las tardes o los días de fiesta, como aquél, leyendo algún libro de poesía si no estaba corrigiendo los exámenes y ejercicios de sus alumnos. Su mujer se acercó y le dio un beso en la frente mientras colocaba un té y unas galletas en la mesita que tenía al lado de la butaca que utilizaba exclusivamente para leer. Ella se sentó en un asiento igual al de su marido, situado junto a él y empezó a ojear una revista del corazón. Gregorio se quitó las gafas de lectura, cerró el libro y miró a su mujer. Sonrió. Ella lo notó y le preguntó con una sonrisa:
-¿Qué pasa?
-Nada. Recordaba el día que nos conocimos. Estoy agradecido de la vida que tenemos ahora.

Ocho años atrás Gregorio salía del instituto donde impartía sus clases de matemáticas. Él era un hombre dedicado y, como nadie lo esperaba en casa, se quedaba hasta tarde en el seminario de ciencias para hacer su trabajo. Era de noche y pocas luces iluminaban su camino hasta el parking donde estaba su coche estacionado. Una luz cegadora en el cielo captó toda su atención. Primero una explosión y luego un punto de luz que cada vez se hacía más grande. Se dirigía hacia él. La luz, que resultó ser un objeto en llamas, impactó contra la escuela y luego se estrelló contra el suelo. El impacto impulsó a Gregorio unos metros hacia atrás. Cuando la tierra y la polvareda que había levantado el contundente cuerpo llameante se disipó Gregorio corrió hacia el lugar de impacto. Allí vio por primera vez a la que sería su mujer. Ella estaba protegida dentro de una especie de globo esférico semitransparente que la mantenía en el centro del mismo. A su alrededor solo había escombros de lo que parecía una nave. Gregorio se acercó y la observó con sorpresa. Su aspecto no era de este planeta. Tenía una cara estirada hacia adelante, su piel era amarillenta y con apariencia más dura que la humana. Su cabeza estaba separada de los hombros por un grueso cuello. Él picó la estructura protectora y la criatura abrió los párpados dejó ver unos ojos pequeños, negros y asustados.
Gregorio escuchó vehículos policiales y temió lo peor. Había visto en películas cómo maltrataban a los seres extraterrestres y no estaba dispuesto a que hicieran lo mismo con aquel ser. La alienígena apretó un botón del brazalete que vestía y la cápsula protectora desapareció.
-¡Ven conmigo! ¡Estás en peligro!
Gregorio la cogió de la muñeca y la arrastró corriendo hacia su coche. La metió en el asiento de copiloto y, después de sentarse él, arrancó el coche. Respiró hondo y volvió a observar a su nuevo invitado.
-A ver, ¿Entiendes lo que te digo? – El ser asintió. – Pues habrá que esconderte, ¿tienes algún disfraz o algo para que no te descubran? – El ser apretó otro botón y su aspecto físico cambió. Ahora era una mujer, de la misma edad de Gregorio. Su piel gruesa y áspera se volvió fina y delicada, su cara alargada ahora tenía unas facciones bellas, sus ojos negros e inexpresivos ahora eran unos preciosos ojos marrones. – Vaya, esto está mejor. Mucho mejor. ¡Vámonos!

-Sí – Contestó su mujer. – La verdad es que, con todo lo que hemos pasado, nos merecemos esta vida tranquila y tan… tan…
-¿Tan normal?
-Exacto – Ella se volvió a acercar a su marido y se besaron. – Por cierto, ¿no era hoy cuando tenías la cita con el médico?
-¡Cierto! Gracias, cariño. Tú siempre tan atenta.
Veinte minutos más tarde, Gregorio se encontraba en la consulta de su médico de cabecera. Siempre que había estado en aquel lugar era por pura rutina. Su médico, le felicitaba continuamente por su salud de hierro, de hecho hicieron amistad y se tuteaban. Pero hacía días que Gregorio tenía problemas digestivos. El doctor se sentó en la mesa con las pruebas, no tenía una cara muy amigable.

-Gregorio, las pruebas que hemos hecho y comprobado afirman un único diagnóstico. No sé cómo decirte esto, pero estás embarazado.

sábado, 22 de marzo de 2014

Reflexión rápida: el poder la exclusividad.

A lo largo de la historia el ser humano se ha dado cuenta que hay un material negociable tan preciado como el oro, el agua o la droga. Me refiero a la información. Tener el control sobre este producto te hace poderoso en maneras insospechadas.
La base de nuestro conocimiento y el contenido de nuestros deseos es información e influye al cerebro de una manera que nosotros no podemos creer.
Voy a ejemplificarlo con una escena cotidiana. Cuantas veces nos ha ocurrido que estamos explicando una anécdota, un chiste o un cotilleo a alguien y un tercero, que sabe la misma información que nosotros lo cuenta antes, destrozando el final. ¿Cómo nos hemos sentido? Nos ha arrebatado el poder de la exclusividad ante otros y eso nos fastidia desde lo más profundo del alma. Otro ejemplo. Estando con unos amigos volvemos a la situación en la que poseemos una anécdota, un chiste o un cotilleo pero en este caso ellos no conocen su contenido y saben que tú lo sabes. Es, sin duda alguna una situación de poder que vamos a saborear hasta el último momento.
Lo que digo no es nada nuevo, la información es poder. Lo que quiero añadir es que es la exclusividad de esa información la que nos hace poderosos.
Este efecto puede extrapolarse a todo tipo de situaciones. Ser el primero en diferentes tipos de contextos cotidianos da cierto poder, o eso creemos. El primero en tener un tipo determinado de teléfono móvil, el primero en conseguir un récord Guiness, el primero en ligarse a una chica/un chico totalmente inaccesible... Estas situaciones crean una ilusión de valor en nosotros. Cada vez que algo deja de ser exclusivo pierde su valor para nosotros. Los móviles quedan obsoletos, los récords se van superando y las personas dejan de ser interesantes ¿Porqué? Es una ilusión, un concepto erróneo de pérdida de valor. Porque aunque no lo veamos el precio por la exclusiva lo ponen los demás, no nosotros mismos. Cuanto más interesados están nuestros amigos (volviendo al segundo ejemplo) por la información que solamente nosotros tenemos, más valor tiene para nosotros. 
Mi opinión: el valor de las cosas se las tienes que otorgar uno mismo. Tus metas deben tener el valor que tú le pongas, no los demás. Las personas son interesantes por sí mismas, no según los juicios de los demás. La exclusividad está bien, es algo interesante pero no debe influir en el valor de las cosas.

viernes, 21 de marzo de 2014

Recomendación: "Sé lo que estás pensando" de John Verdon

Mi fiebre literaria más reciente empezó con dos obras que me han marcado mucho: "Yo, robot" de Isaac Asimov (obra que comenté aquí) y "Sé lo que estás pensando" de John Verdon. El género negro es el que más me ha gustado siempre por su contenido psicológico-criminal pero lo que más me cansaba de las obras de este tipo eran los personajes esteriotipados y las leía únicamente por la historia.
En "Sé lo que estás pensando" hay una mezcla de personajes e historias que atrapa desde la página uno.
El protagonista de este libro y los posteriores del mismo autor ("No abras los ojos", "Deja en paz al diablo" y "No confíes en Peter Pan") es David Gurney, un policía retirado que vive en una urbanización tranquila con su esposa Madeleine (a mi parecer la verdadera inspiración de Gurney). Su paz se ve interrumpida al recibir la visita de un antiguo conocido suyo que le plantea un problema personal: unas cartas con poemas que suenan a amenaza por su vida pasada le están causando temor, sobretodo porque la primera carta contenía un ejercicio igual de simple como misterioso, debía pensar un número y abrir otra carta interior que contenía el número que había pensado.
Casi sin querer, Gurney se ve involucrado en una serie de asesinatos que contienen pruebas tan intrincadas como imposibles que dificultan la vía que lleva a encontrar al asesino.
http://www.revistadeletras.net/wp-content/uploads//2010/07/Se_Lo_Que_Estas_Pensando.ROCA_.062010.jpg
Realmente espero que te haya gustado este post y no dudes en comentarlo y compartirlo por las redes. ¿Ya has leído este libro y los siguientes? ¿Te han gustado? ¿Qué libros quieres que comente? ¡A leer que son dos días!













jueves, 20 de marzo de 2014

Reflexión rápida: Futbol y Gameplays

No me gusta el fútbol. No sigo ligas, ni temporadas, ni champions, ni mundiales. Es más, en mi casa más de una vez he tenido discusiones por ese tema que acrecientan mi odio hacia ese deporte televisado (ojo, subrayo lo de televisado porque es el fútbol televisivo el que no me gusta. Echar un partidito con amigos en alguna ocasión no me molesta, incluso me vendría bien).
Me gusta ver gameplays. No soy un gran seguidor de los canales en Youtube de esa temática pero me echo mis risas con el Rubius, PewDiePie y poco más. Es una distracción, a mi parecer, sana, que no daña a nadie y a veces bien hecha.
Hasta hoy no me había planteado comparar los dos entretenimientos de la siguiente manera: una de la razones principales por las que no veo el fútbol es que no le encuentro sentido a contemplar como una veintena de tíos juegan a la pelota. Estarse más de una hora dejándose llevar emocionalmente por las habilidades futbolísticas de los jugadores es una práctica que para mí no tiene sentido. Pero me he planteado el ver gameplays de esta manera y me encuentro en una encrucijada. No estoy del todo capacitado para hacer una completa comparación de ambas aficiones ya que me manca la práctica de una de ellas, pero al ver gameplays como puro entretenimiento me divierto y me siento identificado con la persona que lo juega al ser yo un "gamer" también (le doy al Minecraft y a mi 3DS, aparte de los libros), pero sé que nunca me comportaría como un aficionado al fútbol borracho en medio de una plaza celebrando la victoria del otro por haber conseguido tal puntuación en equis juego.
No quiero decir con esto que yo sea mejor o peor que ese aficionado aleatorio por ver vídeos en Youtube, sólo quiero exponer esta reflexión porque me planteo la posibilidad de estar viviendo una doble moral sin saberlo: rechazando y riéndome de cómo se quedan absortos los entusiastas del fútbol televisado pero comportándome igual que ellos ante uno de estos vídeos.

Hasta aquí la primera de mis reflexiones del blog. No dudes en comentar si estás de acuerdo o difieres de alguno de mis comentarios y recuerda... ¡A leer que son dos días!

martes, 4 de marzo de 2014

Jornadas Negras en Collbató

Anteriormente ya he hablado de "Esparreguera Negra", de sus proyectos, charlas y entusiasmo por la novela negra. Fui a las primeras presentaciones literarias e hice la reseña en el blog (aquí y aquí) y no pude asistir a las demás por tema de estudios. Pues bien, hace un tiempo "Esparreguera Negra" se ha transformó en "Collbató Negre" para una mayor captación de público y por mayor obtención de recursos. He de decir que lo están petando y prueba de ello son las jornadas negras que van a organizar este marzo.
Tienen un calendario repleto de charlas, concursos y actividades muy interesantes y todas relacionadas con la novela negra, policíaca y criminal. Yo no voy a faltar y os haré la reseña pertinente a esas jornadas. Os animo que, si os gusta este género y todo lo que ello envuelve, vayáis, asistáis y participéis.
Enlace a la página con el calendario:
http://collbatonegre.wordpress.com/jornadas-negras/
Enlace a su página en Facebook:
https://www.facebook.com/collbato.negre

¡A leer que son dos días!